26 Jul 2019
Sobre el modelo de déficit de información científica y otros déficits
“¿Por qué tanta gente se resiste a los hechos y verdades de la ciencia?”, pregunta el padre. “Papá, creo que en realidad estás haciendo más de una pregunta a la vez. Si tu pregunta es: ¿la gente desconfía de la ciencia y de los científicos? La respuesta que mis colegas han estado dando durante las últimas dos décadas es: no, no lo hacen. La ciencia ha sido, y es, un campo muy respetado”. La conversación sigue y ahora le toca al hijo: “¿Sabes cuántas personas se oponen firmemente a la vacunación obligatoria en este país [Italia]?”. Él mismo responde: “Menos del 5%”. A lo que replica el padre: “¡Eso no es posible! Sigo leyendo cosas ridículas sobre las vacunas”. El hijo: “Bueno, ciertamente hay una minoría muy vociferante, sobre todo en las redes sociales. Una proporción significativa de personas piensan que solo unas pocas vacunas deben ser obligatorias, y con las demás, la persona debe decidir”. Y el padre: “¡Ajá! ¡Tenía razón! Esto debe ser porque son ignorantes”. (más…)
30 Ago 2018
Sobre la ciencia como método intelectual y su difícil aplicación en otros ámbitos
¿Qué es la ciencia?, se preguntaba George Orwell en 1945, en un artículo en el semanario británico Tribune, a propósito de la utilidad de extender la educación científica a la población y, a la vez, de implicar más a los científicos en los asuntos públicos. Con su habitual agudeza, apuntaba que la palabra ciencia se usa al menos en dos sentidos, según la conveniencia, y que el saltar del uno al otro enturbia el debate. Por un lado, designa las ciencias naturales y exactas, como la química y las matemáticas; y, por otro, “un método intelectual que llega a resultados verificables razonando en modo lógico a partir de los hechos observados”. Aunque para los científicos y personas instruidas la ciencia es antes que nada una manera crítica de pensar y comprender el mundo, el común de la gente asimila la ciencia con las disciplinas experimentales. Según Orwell, esta confusión es, en parte, deliberada y corporativista, pues promueve la preeminencia de los científicos para razonar y opinar con mayor fundamento, incluso sobre asuntos ajenos a las ciencias, evitando de paso que cualquiera que despliegue un pensamiento racional, metódico y crítico sea considerado científico.
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1 Dic 2010
Sobre la percepción social de la medicina y otros asuntos más triviales
[divider_flat] La ciencia, la medicina y otros asuntos serios suelen salir muy bien parados en las encuestas. Cuando se les pregunta con un cuestionario en mano, el común de la gente dice sentirse muy interesado por estos temas, al menos en mayor medida que por otros considerados más triviales, como el deporte, los sucesos o los horóscopos. Pero las audiencias de los diarios deportivos, de los programas de cotilleo o de las secciones de sucesos superan con mucho las que congregan los temas de ciencia y medicina. En el espacio público pocos eventos suscitan un interés tan notable como un partido de fútbol de máxima rivalidad, digamos un Real Madrid-Barcelona o un Boca Junios-River Plate, que puede tener pendiente durante unas horas a medio país y ser motivo de comentarios varios días después. Que las cosas sean así y no a la inversa podría ser incluso un síntoma de salud social, aunque esto sería muy debatible. (más…)
2 Feb 2007
Sobre el interés social por los temas de ciencia, medicina y salud
La cuestión de si los temas de ciencia en general y de medicina en particular interesan a los ciudadanos más o menos que otros asuntos informativos admite, ciertamente, muchas opiniones y genera una cierta controversia. Por suerte, desde 2002 y cada dos años se realiza en España una gran encuesta nacional que ayuda a calibrar estas opiniones y aclarar algunos aspectos de la cuestión sin tener que echar mano de estudios poco fiables o de otros países. El reciente avance de resultados de la última encuesta, realizada con una muestra de 7.000 personas a finales de 2006, muestra como dato relevante que el nivel de interés de la población española mayor de 15 años por la ciencia y la tecnología es medio (2,9 en una escala de 1 a 5), superior al que suscita la política (2,3) y la economía (2,5), pero inferior al que merecen los deportes (3,1), el medio ambiente (3,5) o la alimentación y el consumo (3,6). Para sorpresa de algunos y reafirmación de otros, de los nueve temas propuestos en esta encuesta, auspiciada por la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología (FECYT), los temas que suscitaban más interés eran los de medicina y salud, con una puntuación de 3,6 sobre 5.
Al margen de este nivel de interés general, las 34 preguntas cerradas que integran el cuestionario de esta III Encuesta nacional sobre percepción social de la ciencia y la tecnología, y que ha sido llevada a cabo por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), revelan otras conclusiones dignas de consideración. Así, por ejemplo, el 80% de los ciudadanos encuestados opina que el esfuerzo de investigación debería concentrarse en un futuro en el ámbito de la medicina y de la salud; el respaldo que merecen todos los demás ámbitos es mucho menor: el segundo es el medio ambiente (27%), el tercero es la energía (20%) y el último de los 10 propuestos es la tecnología espacial (1%). Al igual que en las dos encuestas anteriores, los médicos son la profesión mejor valorada (4,3 sobre 5), por delante de los científicos (4,1) y de los profesores (3,9); los periodistas figuran en octava posición (3,1), los artistas en décima (2,5) y los políticos (2,2) constituyen la peor valorada de las 12 profesiones propuestas. Asimismo, los hospitales son la institución mejor valorada (4,1 sobre 5); la Universidad, la segunda (4); los medios de comunicación, la sexta (3,1), y la Iglesia la peor (2,2) de las 12 consideradas.
En su conjunto, la encuesta muestra que la sociedad española tiene una imagen positiva de la ciencia y especialmente de la medina, la asocia con conceptos positivos, como el progreso y el bienestar, confía en sus instituciones y admite dejar las decisiones sobre la ciencia y la tecnología en manos de los expertos. Quizá, como también apunta la encuesta, porque el interés informativo de los ciudadanos no se ve adecuadamente satisfecho por los medios de comunicación. O sea, la ciencia y la medicina interesan al público, pero los medios ofrecen una información insuficiente y/o poco interesante.