Plomo

Sobre el espíritu de la materia en la obra de Anselm Kiefer

El plomo es un material paradójico. De entrada, es un metal que no lo parece. A pesar de su elevado peso, es tremendamente dúctil y maleable, por lo que ha sido empleado ampliamente para impermeabilizar tejados y hacer tuberías de agua, aunque este uso ahora está prohibido por su toxicidad. Es peligroso pero a la vez protege de las radiaciones ionizantes, y por ello se utiliza para hacer los delantales de los radiólogos. Además, su color azulado se transforma con el tiempo en grisáceo. Esta condición paradójica y metamórfica del plomo, aparte de sus características sensoriales (se puede oler, amasar, moldear) y la pátina de historia que lo cubre, es muy apreciada por el artista alemán Anselm Kiefer (Donaueschingen, 1945), que lo utiliza en muchas de sus obras. (más…)